SOSTENIBILIDAD EN EL CALZADO DE PIEL
Aunque la economía circular y la ecología aún está en sus cimientos para el calzado; y este es un sector al que aún le falta trabajar en el tema, se ha avanzado mucho en la búsqueda de la sostenibilidad en las distintas fases del proceso de fabricación del calzado.
En la actualidad, son muchas las industrias zapateras que han cambiado el enfoque para incluir las normas sociales, la protección del medio ambiente, la economía circular y las emisiones de CO2.
En efecto, apostar por un par de zapatos que nos acompañe a largo plazo, no solo es una cuestión de estilo, sino también de salud propia y ambiental. Y a la hora de elegir, siempre es bueno fijarse en su comodidad, ergonomía y en aquellos parámetros que lo hacen bueno para el planeta. Es decir, qué aspecto lo convierte en un zapato que favorece y aporta a la protección y bienestar del medioambiente.
Por ello, y como las consumidoras se muestran cada vez más interesadas en saber el origen de las prendas que eligen, en Paula Urban trabajamos por conseguir grandes innovaciones. Nuestra producción artesanal y local nos ha permitido lograr una optimización en la producción, evitando la sobreproducción y gestionando mejor los recursos.
Cada vez invertimos más por una forma responsable de producir zapatos. Algo que se traduce en el respeto a las personas, a las consumidoras, a los animales y el medioambiente.
En definitiva, aunque es muy difícil saber a ciencia cierta si un calzado ha sido producido de forma sostenible o poco nociva con el medio ambiente, elementos como los certificados, la Huella de Carbono obtenida por Paula Urban en 2021, o la transparencia con la que hablamos de nuestra de producción es un buen indicio de ello.
¡En Paula Urban llevamos décadas dando prioridad a la protección del medio ambiente!